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domingo, 20 de junio de 2010

TARDES DE MERIENDA Y ZIPPEO (PARA LOS OPTIMISTAS HASTA EL PAROXISMO Y AQUELLOS LINDOS QUE SIEMPRE DUDAN DE SI MISMOS)


MI sobrino Adriel es un personaje maravilloso. Entre sus idas y vueltas, y su acople a la nueva estructura con la llegada de su hermanito, no es consciente de que se le terminan los privilegios. Pero en el fondo sabe que no es nada divertido el compartir el cariño de los seres queridos. En un momento de la tarde, cuando voy a devolver las pelis en el video club, lo miro y le digo: "Te amo", y le doy uno de esos abrazos oseznos que le suelo dar y que hacen que él se cuelgue de mi cual K-oala (con K) y jugamos ambos a que somos divinos y los más bellos. Entonces él me mira, y me pregunta, "a mi hermanito vos también lo amás?"...a lo que me quedo totalmente patitiesa pues la respuesta la da él mismo: "Por ser más chiquito, lo tenés que querer menos, porque lo conocés hace menos tiempo", y dándose cuenta del error solito se autorresponde "Entonces debés querer más a los grandes porque tienen tu edad..." y me baja la mirada hermosa que tiene. Y yo lo miro, mientras lo tengo a upa mío, y me doy cuenta de lo que está diciendo. Entonces, en esos casos sólo queda abrazarlo muy fuerte y decirle que soy única para él, que a los demás los quiero mucho, los quiero con el alma pero por cercanía hay personas con las que tenemos más afinidad. Mientras camino hacia mi casa, él me mira porque sabe que va a jugar conmigo al Mortal Kombat, y (yo trato de esconder a mi gato en la habitación sabiendo que me va a esconder alguna tanga, pues parece ser adicto a meterse en el placard y robar ropa interior de tiritas -limpia, of course!!!!) Entonces juego con Adriel para distraerme nuevamente, todo el día es distraerme haciendo la nada misma, cada tanto vengo y escribo un rato -como si escribir me quitara la desesperanza que siento- pero juego, y trato de hacer brutallyties y fatallyties, pero ningua sale. Adriel me pregunta si extraño. Yo le contesto que soy extraña. Él se ríe, y dice: "Sos tonta Karina, te pregunté si extrañabas a alguien". Yo, sonriendo de costado, le propongo tomar la leche. Todos adoran mi merienda porque hago las más ricas tostadas con manteca y miel. Con ese olorcito de fondo (debería dejar de ingerir carbihidratos) se me viene un lindo recuerdo:

Zipper sonnet

de arriba abajo o bien de abajo arriba
este camino lleva hacia sí mismo
simulacro de cima ante el abismo
árbol que se levanta o se derriba

quien en la alterna imagen lo conciba
será el poeta de este paroxismo
en un amanecer de cataclismo
náufrago que a la arena al fin arriba

vanamente eludiendo su reflejo
antagonista de la simetría
para llegar hasta el dorado gajo

visionario amarrándose a un espejo
obstinado hacedor de la poesía
de abajo arriba o bien de arriba abajo

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